Diosidencias, señales de Dios

A los 22 años, de regreso en mi ciudad, había restaurado mi vida casi por completo luego de la depresión. Sin embargo, las heridas mal curadas siempre vuelven a sangrar. Asi fue como producto de una desilusión amorosa que se sumaba a otras tantas, y un coctel de frustración, estalló dentro mío la rabia y el dolor.

Podría ser la vida en la tierra tan difícil? Me pregunté, como casi todos los que aun no despiertan, desde el papel de la víctima.

Esa tarde estaba sola en casa. Puse música punk muy fuerte, asi mi llanto podría perderse en el ruido. Mientras rompía algunas fotos y cartas; tipico. Pero cuando ya no quedaba nada por romper, la tentación de terminar con el dolor resonaba en mi cabeza.

Fue entonces cuando ocurrió. Se abrió lucha la Fe contra mi propia oscuridad, y entre lágrimas y con la voz quebrada reté a Dios.

Donde estás? Donde? Manifestate ya! Como es posible que permitas dentro mío tanto dolor? Manifestate! No existís. Nunca exististe!

No sería tan doloroso el paso por aquí si fueras real. Y si acaso lo sos, donde estas? Manifestate! Si existís, manifestate ahora, Ya!

El modo aleatorio de mi winamp, había dejado de reproducir punk hace rato. Sin embargo no había reparado en la música hasta entonces.

Luego de mi último pedido de manifestación, casi rendida en la cama de tanto llorar, escucho una hermosa voz cantar:

"Y si niegas mi existencia, Lo que yo siento por vos 
El lucero de este cielo 
te dirá que aquí estoy yo 
Te dirá que soy tan cierto como lo es tu corazón 
Como el color de la sangre..."

Mi alma, llena de fe, se abría paso entre pensamientos y emociones oscuras que mi ego proyectaba. Y la manifestación se hacia audible...

Mi corazón se frenó, otra vez lleno de vergüenza por haber dudado. Me arrodillé, esta vez con lágrimas de gozo, de sanación.

Me preguntaba como una canción tan lejana a mi música del momento podía haber llegado al winamp. Y sin salir del asombro y del amor, escuché cada palabra, porque sabia que de Dios venia.

"Si acaso ya no vuelves, tal vez
No olvides que siempre yo te ame
Mi vida yo por ti entregué 
Fue por este amor que calle
El reino de mi Padre deje
Y en busca de tu amor yo zarpe.
No hay que temer, te cuidaré, aquí estaré."

Y me zambullí en esos brazos que sobre mi cabeza se abrían para contenerme. Mientras comprendía todo.

Mientras en mi vida se hacia LA LUZ.

Supe entonces que esa desilusión era necesaria para poder vivir esa experiencia limite que me acercaba a Dios desde otro lugar.

Mientras Jesus me abrazaba, vi pasar mi vida frente a mi, con momentos aún más trágicos que éste, donde yo salía adelante sin dolor alguno. Entendí lo que me estaba mostrando, que era fuerte!

Le pregunte, como hacia!? Como es posible que haya soportado peores cosas y aun siendo mas chica. Y me mostro la imagen de una niña pequeña y triste, recostada en su cama, con el velador prendido.

Entre sus manos, llevaba una birome, y en su regazo un cuaderno oficio cuadriculado. Esbozaba algunas palabras que alcance a leer: "Querido Jesus, hermanito, no sabes lo que me paso hoy... "

¡Hey! Pensé. Esa niña soy yo. Me levante del suelo y corrí a revolver mis bibliotecas. Quizá ese compendio de cuadernos diarios aun estén allí. Mientras lo hacia, ya la tristeza había desaparecido y sentía una extraña alegría.

Y allí estaba. Eran mis cuadernos diarios que datan del año 1999. Los leí al pasar, y en todos los momentos, felices o difíciles, estaba yo ahí escribiéndole mi parte diario a Dios.

Pero mi sorpresa fue mayor cuando en muchos momentos, abría algunas rayas de diálogo, o paréntesis y hacia anotaciones extra, que sonaban a respuestas. A soluciones. Y naturalmente continuaba con algo como: y si, tenes razón. Lo haré y mañana te cuento. -

Todo el tiempo que había sobrevivido en la tierra, YO había estado cerca suyo POR ESO ERA FUERTE. Compartía todo lo que me ocurría en el dia con El, Y EL ME RESPONDIA.

En cambio ahora, llevaba 1 año sin escribirle, sin contar con El, porque había pensado que llevar cuadernos diarios en una época mas bien cibernética había pasado de moda. 
Me había prendido en la moda del fotolog y los blogs, escribía mis partes diarios para la gente, que en función de sus propios mambos, me juzgaba.

Había olvidado por completo que mis cuadernos diarios eran mas que un diario intimo, eran MIS CONVERSACIONES CON DIOS.

Y haber estado cerca suyo todo ese tiempo, me hacia fuerte. Sin embargo al alejarme para "adorar" lo nuevo, perdí la fuerza que me sostenía.

Entendí todo. Nunca dejó de estar ahí, deseoso de encontrarme entre unos renglones apretados para escribir sus palabras mas tiernas, en respuesta a mis inquietudes mas variadas.

Quien había cerrado esos puentes, fui yo. Yo elegí escribir para alguien mas, y perdí fuerza porque el amor humano, aunque amor, es imperfecto, juzga y casi siempre desnutre. 
Ahora había tenido que pagar el precio de mi elección, y estaba claro. Sin embargo en ese profundo dolor, (porque el precio era caro) CLAME A DIOS CON TODAS MIS FUERZAS, y el se manifestó.

Comprendí que quien no existía era yo, al menos no lejos de la Fuente. Comprendí que cuando mas fuerte fui, fue cuando mas cerca suyo estuve. Entendí que aceptar las consecuencias de mi libre albedrío, y clamar, me conducían ahora a reencontrarme con mi verdadero amor.

Muchos amores en UNO. Amor a la Vida, a las Palabras, a la escritura. Amor a la música. Amor a mi misma. Y en todos esos amores, su AMOR.

"Aunque lejos te hayas ido, y se apague tu amor
Mi amor siempre incansable luchará a tu favor."

No importa lo que pase. No importa lo que estes condenado a vivir. No importa cuanto te alejes del Amor, siempre volverás.

Cuando aceptas que esa es la única salida a la Oscuridad, la Luz clarifica mente y alma, sanando por completo los rasguños que hemos ganado lejos de casa.

Todo lo que vivimos, es el resultado de nuestras elecciones, y todo lo permite Dios para que a través del dolor purifiquemos y regresemos.

Sin embargo, luego de retomar la escritura, me susurraron: Ahora el ser humano es tan habitue del dolor y el sufrimiento. Esta tan cómodo allí, que quizá no soporte el grado de Amor y Armonía que hay en el Reino de los cielos.

Pon tu mano en el pecho. El Reino de los cielos esta allí.

Ahora decide, como cada dia, donde quieres vivir. Pero esta vez, hazlo con consciencia.

Por Patricia Méndez