Podran imitarnos, pero jamas igualarnos

Es difícil pensar a la envidia como un simple malestar ante lo que no se tiene, aunque muchas veces comienza siendo un deseo de parecerse a alguien más, que no sea a uno mismo. 

Siento que es posible pensarla como una búsqueda frustrada de uno mismo. Porque quien se busca a si mismo sin éxito, comienza a querer parecerse a un referente, y en su fracaso se topa con esa idea de: por que el si? - 
Identificarse con algo o alguien es natural como parte del proceso de apego a la tierra, y a la identidad del ego, a la personalidad. Pero el ego es jodido, porque intenta, por todos los medios, alejarnos del Ser, de la esencia, de ese pedacito de alma nuestra en el que habita nuestra autenticidad y nuestra originalidad. 
Eso único e irrepetible que Dios creo en cada uno. 

A las personas nos cuesta aceptarnos como un pequeñito pedazo único e irrepetible formando una gran Unidad. Nos cuesta reconocer la Unidad en nosotros mismos, y al negarla dentro nuestro reproducimos la identificación o la copia del referente como búsqueda del reemplazo de esta Unidad. Es decir buscamos pertenecer o parecer, para Ser.

Muchas veces esta búsqueda es frustrada, por razones obvias. Cada uno es lo que es. Y por ello su destino es el que es, y aunque pudiera ser similar o afín a otro es ÚNICO. No importa cuanto te esfuerces en cambiarlo o en cambiarte, Dios no se equivoco al hacernos como somos. 

Nos equivocamos nosotros al negar esta Unidad dentro nuestro y al no aceptar que cada uno es una pieza única e irrepetible en la creación.

La envidia aparece cuando la persona ya lleva tiempo intentando ser quien no es. La consciencia de si mismo no es total, porque no se reconoce a si mismo como un ser lleno de potencial, defectos y virtudes. Se piensa como lleno de virtudes, potencial y nada de oportunidades. 
Se piensa a si mismo como desafortunado, cuando en realidad es él mismo quien insiste en permanecer en el camino incorrecto. 

Cuando algo no sucede, por mucho que insistamos en eso, es simplemente porque no esta destinado a suceder. Asi lo has pactado tu mismo. Quien entiende esto, enseguida toma otro camino, porque recuerda que si debe ser simplemente será! 

Quien no entiende esta ley de Divina Voluntad y Libre Albedrio, insistira por el camino que no esta abierto, y maldecirá a quienes sí les está destinado, diciéndose a si mismo que tambien puede lograrlo en lugar de salir en busca de su verdadero Ser y designio. 

Al fin de cuentas, lo que las personas envidian, no es un objeto de deseo que el otro pueda tener, sino la energía. 

Una persona que se vive a si misma como única, pero conectada a la Unidad, reproduce su tarea personal sin dificultad. Sabe lo que quiere, sabe para que esta aquí en este mundo y va por ello. Y las puertas se le abren, y en la medida en la que su tarea personal se resuelve, por ser parte de la Unidad, la humanidad toda evoluciona. Esta sincronizado con su don divino porque se ha encontrado a si mismo. Vive su Ser Verdadero. 

Esta energía tan sublime es un faro en la oscuridad de quienes, aun despiertos, buscan su Ser, su don y su destino. Su lugar en el mundo. 

Muchos lo seguirán como a un líder intentando imitar pero sin igualarlo jamas. Porque cada persona es única, con un don y un destino singular, característico de si mismo, perteneciente a su Ser Verdadero como parte de una Unidad y Misión Universal. 

Nuestra tarea es encontrarnos. Saber quién se esconde detrás de varias capas de identificaciones, detrás de nuestro ego o personalidad. Descubrir en que somos realmente buenos, y que nos llena de Amor hacer. Y hacerlo. Solo asi nos sentiremos plenos, llenos de dicha y satisfacción. Alejando la envidia de nuestro corazón, y convirtiéndonos en los propios lideres de nuestro camino. 

Todos somos una pieza única en este gran rompecabezas universal, y para que el plan funcione cada pieza debe volver a su lugar. 

Mientras mas tiempo perdemos en intentar ser o parecer lo que no somos, mas demorara el plan en concretarse. 

Aventúrate a un viaje hacia el fondo de ti mismo, preguntate quien eres, y a que has venido. Tu alma lo recuerda. 

Lo que estas llamado a hacer, no puede hacerlo nadie mas en ningún lugar. Lo que estas llamado a Ser, no puede ser nadie mas en ningún lugar. Solo atrévete a ser tú.

Un verdadero líder te mostrará como hacerlo; con amor, con entrega y con pasión. Si eres capaz de sentir amor por lo que estas haciendo, entonces estas haciendo lo correcto. 
Un líder no te mostrara nunca qué hacer, porque el qué es único para cada uno. Debes imitar el cómo, y descubrir el qué. 

Por Patricia Méndez